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| Foto: JavierPhotoRosa | Music Photographer. — con Mayte Atienza Rodriguez. |
Durante un año se ha esperado con auténtica fidelidad lower estos tres días. Para danzar hasta el final con Suede, rememorar clásicos con Los Planetas, hacer del Low una pista de baile con Hot Chip, gozar de las melodías de Belle and Sebastian, emocionarse con Vetusta Morla o quemar zapatilla con Black Lips… En definitiva, formar parte de las 78.000 personas que han disfrutado de la música sin fin y explotando cada minuto al máximo. Sin vosotros, Low Festival solo sería un festival más.
Y sí, lo sabemos, las ganas de un nuevo Low comienzan a aparecer…y el Sr. Low no quiere que sufráis. Así que estad atentos porque pronto habrá noticias sobre el Low Festival 2017. Mientras tanto, recordad cada momento vivido en esta edición porque ya sabéis, cada año es irrepetible.
Los madrileños Vetusta Morla cierran un Low Festival exitoso que congregó a casi 78.000 asistentes durante los 3 días.
Los madrileños Vetusta Morla cierran un Low Festival exitoso que congregó a casi 78.000 asistentes durante los 3 días.
Los lowers pudieron disfrutar de una intensa sesión musical repleta de sol y energía que, un año más, posicionó al festival como uno de los más reconocidos del país.
Los británicos The Kooks coronaron esta última sesión e invadieron el Escenario Budweiser en su única actuación en España. Su eufórico directo y su repertorio lleno de himnos generacionales como “She Moves In Her Own Way”, “Naive” o “Junk Of The Heart (Happy)”, hicieron disfrutar a un público más que entregado.
Pero sin duda la más aclamada de las actuaciones fue la de Vetusta Morla, también en el Escenario Budweiser. Los madrileños hicieron temblar los cimientos de Low Festival con una actuación muy especial en la que repasaron los temas más icónicos de su carrera. Miles de personas se dejaron llevar por el rock alternativo de la banda que de nuevo demostró ser uno de los grandes referentes del indie a nivel nacional.
Junto a ellos marcaron la diferencia los granadinos 091, que llegaron a los corazones de los allí presentes con un show en el que tuvieron cabida tanto sus temas más evocadores (“La noche que la luna salió tarde”) junto a los más eléctricos (“Qué fue del siglo XX”), con las que marcaron a fuego una noche mágica. Cerraban este espacio los internacionales Miami Horror que con su característico electro-pop convirtieron el festival en la mejor pista de baile.
El Escenario Ron Matusalem contó con la presencia de bandas del pop nacional como Mucho, encargados de abrir el festival con su tema “La primera luz del día”, sin olvidarse de hits como “Grupo revelación”. También se pasaron por este escenario los aclamados Miss Caffeina o el polifacético Carlos Sadness, que disipaba el calor levantino a media actuación con temas como “Bikini”. Otros nombres internacionales y consolidados fueron los de Marky Ramone’s Blitzkrieg, que con Ken Stringfellow como frontman repasaron temas como “Sheena Is a Punkrocker” o el mítico “Blitzkrieg Pop” en un apabullante ejercicio de punk ramoniano, o Javiera Mena, que consiguió elevar aún más la temperatura con hits como “Espada” y su electrizante cuerpo de baile.
En esta última jornada el Escenario Wiko se consolidó como el espacio más eclético con la presencia de géneros que iban desde el irresistible sonido country-folk de Badlands (una de las nuevas bandas de Sona la Dipu) al post-punk de Girls Names, pasando por el ochentero sonido de El Último Vecino, que repasó los hits de su último LP, “Voces”.
En el excitante Escenario Jägermusic, Dj Göo inició una tarde de música desenfrenada con una sesión donde destacaron estilos como la electrónica y el hip hop. Siguieron esa línea de sesiones musicales sin límite Raretraxxx y Jupiter Lion DJ Set, que precedieron a The Basement, los encargados de cerrar el espacio con sus trepidantes ritmos que revolucionaron a los amantes del funky, el disco y el techno.
A lo largo de todo el festival casi 78.000 personas han podido participar en diferentes y originales actividades mientras disfrutaban de la mejor oferta musical. Pudieron festejar su amor y casarse en la MTV Chapel at Low Festival para luego celebrar el banquete de boda en los diferentes food trucks del área de restauración. La tómbola y el futbolín de Tuenti pusieron el toque retro mientras que la zona market de D.Franklin permitió a los asistentes renovar su outfit festivalero.
La concienciación también ha tenido protagonismo en el Low, gracias a la iniciativa #compartirmomentos que buscaba sensibilizar al público sobre el VIH con información y prevención sobre la enfermedad, además de enfocar el sexo seguro de forma positiva. Antes de volver a casa, los más precavidos tuvieron la oportunidad de recordar la importancia de la seguridad vial de la mano de Euromaster y encontrar el alquiler más cómodo con Goldcar.
Así un año más el festival se despide con gran éxito de tres días de conciertos, momentos irrepetibles y buen rollo que no han hecho más que confirmar el auténtico espíritu #thepowerofLow. La cuenta atrás para Low Festival 2017 no ha hecho más que empezar...
Los británicos The Kooks coronaron esta última sesión e invadieron el Escenario Budweiser en su única actuación en España. Su eufórico directo y su repertorio lleno de himnos generacionales como “She Moves In Her Own Way”, “Naive” o “Junk Of The Heart (Happy)”, hicieron disfrutar a un público más que entregado.
Pero sin duda la más aclamada de las actuaciones fue la de Vetusta Morla, también en el Escenario Budweiser. Los madrileños hicieron temblar los cimientos de Low Festival con una actuación muy especial en la que repasaron los temas más icónicos de su carrera. Miles de personas se dejaron llevar por el rock alternativo de la banda que de nuevo demostró ser uno de los grandes referentes del indie a nivel nacional.
Junto a ellos marcaron la diferencia los granadinos 091, que llegaron a los corazones de los allí presentes con un show en el que tuvieron cabida tanto sus temas más evocadores (“La noche que la luna salió tarde”) junto a los más eléctricos (“Qué fue del siglo XX”), con las que marcaron a fuego una noche mágica. Cerraban este espacio los internacionales Miami Horror que con su característico electro-pop convirtieron el festival en la mejor pista de baile.
El Escenario Ron Matusalem contó con la presencia de bandas del pop nacional como Mucho, encargados de abrir el festival con su tema “La primera luz del día”, sin olvidarse de hits como “Grupo revelación”. También se pasaron por este escenario los aclamados Miss Caffeina o el polifacético Carlos Sadness, que disipaba el calor levantino a media actuación con temas como “Bikini”. Otros nombres internacionales y consolidados fueron los de Marky Ramone’s Blitzkrieg, que con Ken Stringfellow como frontman repasaron temas como “Sheena Is a Punkrocker” o el mítico “Blitzkrieg Pop” en un apabullante ejercicio de punk ramoniano, o Javiera Mena, que consiguió elevar aún más la temperatura con hits como “Espada” y su electrizante cuerpo de baile.
En esta última jornada el Escenario Wiko se consolidó como el espacio más eclético con la presencia de géneros que iban desde el irresistible sonido country-folk de Badlands (una de las nuevas bandas de Sona la Dipu) al post-punk de Girls Names, pasando por el ochentero sonido de El Último Vecino, que repasó los hits de su último LP, “Voces”.
En el excitante Escenario Jägermusic, Dj Göo inició una tarde de música desenfrenada con una sesión donde destacaron estilos como la electrónica y el hip hop. Siguieron esa línea de sesiones musicales sin límite Raretraxxx y Jupiter Lion DJ Set, que precedieron a The Basement, los encargados de cerrar el espacio con sus trepidantes ritmos que revolucionaron a los amantes del funky, el disco y el techno.
A lo largo de todo el festival casi 78.000 personas han podido participar en diferentes y originales actividades mientras disfrutaban de la mejor oferta musical. Pudieron festejar su amor y casarse en la MTV Chapel at Low Festival para luego celebrar el banquete de boda en los diferentes food trucks del área de restauración. La tómbola y el futbolín de Tuenti pusieron el toque retro mientras que la zona market de D.Franklin permitió a los asistentes renovar su outfit festivalero.
La concienciación también ha tenido protagonismo en el Low, gracias a la iniciativa #compartirmomentos que buscaba sensibilizar al público sobre el VIH con información y prevención sobre la enfermedad, además de enfocar el sexo seguro de forma positiva. Antes de volver a casa, los más precavidos tuvieron la oportunidad de recordar la importancia de la seguridad vial de la mano de Euromaster y encontrar el alquiler más cómodo con Goldcar.
Así un año más el festival se despide con gran éxito de tres días de conciertos, momentos irrepetibles y buen rollo que no han hecho más que confirmar el auténtico espíritu #thepowerofLow. La cuenta atrás para Low Festival 2017 no ha hecho más que empezar...
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